VUELVE STALIN A RUSIA

          "Todo muerto es bueno"

                                                                                                                                                                                                                                                       Mi padre

El sanguinario, el terrorista, el criminal, el genocida, el que asesinó a millones de personas, de un tiempo a esta parte empezó a gozar de una popularidad que va en ascenso según la encuestadora del Centro Levada que sugiere que la popularidad de Stalin ha crecido desde "2015, con un 46% de los rusos expresando una opinión favorable de él en 2017 y un 51% en 2019.  En una encuesta de 2021, un récord del 70% de los rusos indicó que tenía una opinión mayoritariamente/muy favorable de Stalin. El mismo año, una encuesta del Centro mostró que Joseph Stalin fue nombrado por el 39% de los rusos como la "figura nacional más destacada de todos los tiempos" y, aunque nadie recibió una mayoría absoluta, Stalin estaba muy claramente en primer lugar, seguido por otro líder soviético, Vladímir Lenin, con un 30% y el poeta ruso Alexander Pushkin con un 23%. Al mismo tiempo, hubo un crecimiento de la literatura proestalinista en Rusia, que en gran medida se basa en la tergiversación o fabricación de material original.  En esta literatura, las represiones de Stalin son consideradas como una medida necesaria para derrotar a los "enemigos del pueblo" o como el resultado de funcionarios de nivel inferior que actúan sin el conocimiento de Stalin".  

¿Qué pasó? ¿Por qué Stalin vuelve a ocupar las calles, plazas y lugares públicos de Rusia? ¿¡Qué pasa en Rusia!? 

Después de haber sido calificado de criminal y acusado de ser el responsable de la muerte de millones de seres de la URSS; el líder que liberó a la humanidad del fascismo Alemán, Josef Stalin, vuelve a ocupar calles, plazas y lugares públicos. El líder de la federación rusa, Vladimir Putin, decidió restaurar su imagen, por qué será. Sería pertinente una encuesta externa a Rusia, para valorar su popularidad internacional y verán que su popularidad seguramente también estaría al alza. 

Así como Mao industrializó China, Stalin lo hizo con Rusia, esa es la herencia que ambos dejaron no solo a Rusia y a China, sino a la humanidad señalando el camino para transitar por el socialismo rumbo al comunismo. La industrialización de los países explotados, de los países pobres, son los que necesariamente tendrán que hacer una revolución violenta, para liberarse del yugo. Ese camino, fue traicionado por miserables como Deng Xiaoping y Nikita Jrushchov que restauraron el capitalismo. Si países como Rusia y China están en la situación que están dentro de este sistema, es por Lenin y Stalin y por Mao respectivamente.

Pero lo fundamental, ahora, es el acecho, el cerco, que ha ido montando Estados Unidos a través de la OTAN que ha ido rodeando a Rusia.  El fascismo ucraniano geopolíticamente se ha prestado al  juego del imperialismo occidental en su  estrategia para jaquear a la federación Rusa. Por su parte Putin, en su estrategia interna ha recurrido a la imagen de Stalin para calar en el ánimo, en el sentimiento histórico de los rusos, para inyectarle optimismo y valor a los rusos que vuelven a identificarse con el triunfo de la revolución bolchevique (1917), con Lenin y con Stalin al verse amenazados otra vez por el fascismo Occidental. 

Aquellos que ahora se rasgan las vestiduras por reflotar la imagen de Stalin, calladitos, están con lo que ocurre en Palestina. EEUU y Europa, lejos de ello, apoyan al genocida "mata niños", Benjamín Netanyahu y  a esa iglesia fascista, sobre todo la cristiana que guarda silencio, un silencio cómplice con las matanzas en Gaza. Hipócritamente sacan a relucir los millones de muertos de Stalin, esa iglesia come hostia, no recuerda los asesinatos cometidos, como ahora en Gaza, antes en las guerras santas (I, II y II), las guerras de los cruzados, Sodoma y Gomorra... en la obra "Historia criminal del cristianismo" de Karl Heinrich Leopold Deschner, la cantidad de crímenes horribles que cometió la iglesia y el cristianismo, en nombre de Dios. Y lo estamos viendo nuevamente en Gaza, Palestina; y la iglesia ni se inmuta. Con su silencio aprueba lo que está ocurriendo en el mundo, donde la iglesia a más aún bendice las armas con que el imperialismo masacra a los pueblos oprimidos en nombre de dios para saquear sus riquezas. 

Así pues, la iglesia asesinó y derramó mucha más sangre que el comunismo, y lo hizo imponiendo su fe a sangre y fuego por mandato divino, por mandato de Dios.  Ahora mismo en Gaza, Palestina, Medio Oriente, ¿Israel por mandato de quien está asesinado allí? Está escrito en la biblia, por mandato de Dios, por eso es que la iglesia guarda silencio.

Vladímir Putin no es comunista, después de despotricar de Stalin se ha dado cuenta de que la imagen de Stalin le puede beneficiar, política, ideológica,  social y militarmente para enfrentar, como lo hizo Stalin en su momento, al fascismo alemán. Ahora que el fascismo imperialista está en crisis y busca desesperadamente ganar mercados (allí no está quiso hacerse de Canadá, de Groenlandia, del canal de Panamá, del Golfo De México...), pero el tiro le salió por la culata, Rusia le ha hecho frente, no solo al imperialismo y fascismo, sino que se va imponiendo conjuntamente con el BRICS mientras que el imperialismo NA pierde cada vez más mercado como en América Latina, África, donde el BRICS extiende sus tentáculos y los EEUU se sumerge cada vez más en una crisis que lo ahoga con una deuda externa de más de 36 billones de dólares. Rusia, ahora se encuentra cercada por las fuerzas que integran la OTAN bajo el mando del imperialismo NA que buscan descuartizar el inmenso territorio ruso para repartírselo y generar nuevos mercados, mercados que lo van perdiendo en América Latina y África. Se escandalizan los miserables por las ejecuciones realizadas por Stalin contra traidores, reaccionarios y criminales que mataban no solo con armas, sino también de hambre, como ahora lo hacen en Israel en nombre de un Dios y de una religión que se impone con la mentira.

NT: 5 de junio de 2025