POEMA: MILLONES DE OPRIMIDOS
Millones de oprimidos
es el nombre del autor
de este poema.
Las balas son su ritmo,
su rima
es el grito de las masas:
¡El poder nace del fusil!
Millones de oprimidos
en el mundo hablan con:
palos,
piedras,
fusiles,
dinamita.
¡Esta es nuestra palabra armada!
Que cada palabra,
que cada verso,
nacido en los:
campos,
socavones,
en las fábricas,
en las escuelas,
en las cárceles
. . .
. . .
animen la acción
contra esta maldita guerra
que nos liquida aquí
y en el vientre materno.
¡Esa es la idea!
Se imprime a diario
con la rotativa:
De los dientes
que mastican la rabia.
De los labios
que se han olvidado
ya del beso.
De los ojos
que derramaron
ya todas sus lágrimas.
Por eso yo os digo
oprimidos del mundo
nadie es autor
de este poema
¡sólo tú!
¡sólo tú!
millones de veces tú,
billones, más billones
de veces tú.
¡Oh Maiakovski!
Ayer cayó Iván,
tu Iván,
tu gran Iván.
Lo intoxicaban con cola,
con pasta todos los días
y lo ahogaron en whisky.
No pudo soportar
le destrozaron:
el hígado,
el cerebro.
Desde América,
más cerquita aún,
desde Europa,
desde Asia,
más aún,
desde su seno
asesinaron
a Iván.
Y ese día,
ese amargo día
para los oprimidos del mundo,
la amarilla prensa mundial
anunció con tus colores
la noticia:
. . .
. . .
. . .
C. Dantés E