La muerte de un lobbista vende patria
Hernando Guerra García Campo (Nano Guerra García) "querido por los fujimoristas”. Aunque ese sentimiento traduce solo al interés de las partes. Un tránsfuga, lobbista vende patria que pasó por diferentes partidos de “izquierda" (PSR, FS, PSN, ASN), hasta ir a parar con los fujimoristas de Fuerza Popular que lo llevó al congreso en 2021 hasta su penoso deceso el 29 de setiembre de 2023 en el balneario de Punta Bombón, provincia de Islay, departamento de Arequipa.
Hernando Guerra García es a Keiko Fujimori como Hernando de Soto lo fue a Alberto Fujimori. Nano Guerra pretendía tomar la posta para desarrollar su proyecto la "emprendeduría", las Pymes. Proyecto ya archimanoseado por De Soto, un octogenario, un neoliberal ya "quemado" que Alberto Fujimori lo integró como asesor en el gobierno que llevó al Perú a la ruina y que el fujimorismo actual, al igual que el de los 90, busca exterminar rematando las materias primas del territorio peruano.
En los dos años y dos meses como congresista se ganó a pulso el odio de los peruanos, odio que fue sembrando y que el fujimorismo viene cosechando desde hace muchos años. El odio hacia al extinto congresista, como a su lideresa Keiko y al fujimorismo es el mismo. Keiko, no termina de entender que los peruanos la aborrecen.
Nano Guerra García, un acérrimo anti fujimorista. Cómo hizo para ingresar a las filas del fujimorismo. Nano Guerra ya había dejado de ser caviar, se presentaba a las elecciones por el Partido Solidaridad Nacional el 2016 candidatura que resultó frustrada. El PSN era para el fujimorismo una organización para reciclar a sus miembros allí fuero a parar algunos fujimoristas -como Rosa Bartra- después de la estrepitosa caída del fujimorismo en las elecciones parlamentarias congresales del 2020. De allí es que surge Nano Guerra García como jefe del plan de gobierno de Keiko Fujimori para las elecciones generales del 2021 encabezando con el número 1, la lista de FP.
Nano Guerra, fue un congresista fujimorista que no debió estar allí legislando porque lo hacía para los grupos de poder no para el pueblo. Decir que 930 soles es mucho dinero para un trabajador y que el sueldo de un congresista debería ser como el de un ministro, nos dice el tipo de individuo que ha sido. Pero no solo eso. Un hombre que se va de juerga cuando quiere, donde quiere y que después que se han divertido gestiona la licencia si alguien reclama pero sino, no paso nada. Y, que además lamenta trabajar. Este hombre que se queja de su sueldo -más de 30 mil soles entre otras gollerías- dice, además que los congresistas deberían ganar como ministros. De este tipo de congresistas es la mayoría por no decir todos, incluidos los de "izquierda". Vladimir Cerrón, será el próximo Nano Guerra Garcí
Otra sinvergüenza, Rossallia Amuruz que en plena pandemia del COVID celebraba fiesta en su casa que en la madrugada del 29/09 asistía a otra fiesta en donde ocurrió un asesinato. Los escándalos le persiguen a la congresista que dice se arrepiente de haber asistido a esta trágica fiesta. Una más, Digna Calle Lobatón congresista con “licencia” sin goce de haber que vive en Estados Unidos desde hace tres meses. Estos hechos son solo unas perlas de las tantas de este congreso mafioso y corrupto.
Este hombre murió despreciado por el pueblo. Murió víctima de las políticas que asesinan al pueblo. Él, es parte de su asesinato. Miles de peruanos mueren así, por negligencia de un sistema que tras pasar lo del COVID no hicieron nada por solucionar la pésima atención sanitaria de la cual la usurpadora Dina, se ufanaba ante la ONU hace unas semanas.
Pero vayamos a la muerte del congresista Nano Guerra que murió de muerte súbita (infarto agudo de miocardio o fibrilación ventricular). El paseo que le dieron no era necesario para terminar metiéndolo en volandas -aún cuando les dijeron que no había médico- en una posta médica. Solo se necesitaba una persona, una sola, que le hiciera Reanimación Cardio Pulmonar, nada más. El desfibrilador era necesario pero ante las circunstancias se podía prescindir, en ese momento. La RCP clásica era la alternativa ¿Nadie sabía hacerlo? El tiempo inútil que se perdió fue vital ¿Por qué no se llamó a urgencias tal vez desde un centro especializado hubiesen indicado como hacer la maniobra de RCP mientras la ambulancia se dirigía al lugar.
En conclusión, Nano Guerra García, fue un hombre políticamente inestable que encontró su lugar en un partido que ha hecho mucho daño al Perú y que como producto de su gestión murió como un miserable llevado en volandas como se lleva cualquier cosa. Es muy triste que el pueblo se alegre por la muerte de un ser humano, y es lógico porque durante tantos años lo han maltratado y asesinado de todas las formas habidas que su odio ha despertado su consciencia de clase y reacciona con alegría, como es el caso de este hombre que fue despota y cruel con el pueblo que ante su muerte se alegra sobre todo por las circunstancias en que ocurrió. Un hombre que buscaba un sitio y lo encontró a los 60 años. Y, que el pueblo creyente y religioso le desea no el purgatorio, sino el mismo infierno que es donde debe estar ardiendo.